XPS Y PASSIVHAUS, DESTINADOS A ENTENDERSE
La actual coyuntura, de preocupación por el coste de la energía y por las consecuencias del cambio climático, ha centrado la conversación en el sector de la construcción en la eficiencia energética y la edificación más sostenible, preparada para optimizar el uso de unos recursos escasos y reducir las emisiones nocivas de gases de efecto invernadero. Uno de los protagonistas indiscutibles de esta tendencia es el estándar Passivhaus.
Los edificios construidos según los requisitos de este exigente estándar, más conocidos como casas pasivas, logran reducir el consumo de energía al mínimo mediante una rigurosa aplicación de diferentes medidas de eficiencia, con ahorros de entre un 70% y un 80% de la energía en comparación con una vivienda tradicional. Passivhaus se basa en cinco pilares básicos: aislamiento térmico, hermeticidad, ausencia de puentes térmicos, puertas y ventanas de altas prestaciones, y sistemas de ventilación con recuperación de calor.
Recientemente, desde AIPEX recordábamos que el poliestireno extruido, también llamado XPS, es un material idóneo para cumplir con los estrictos criterios necesarios para acreditar un edificio como Passivhaus. La elevada durabilidad de este material, que conserva sus propiedades inalteradas a lo largo del tiempo, junto con su alta resistencia a la compresión, su versatilidad y, sobre todo, su capacidad de aportar confort térmico y evitar patologías como las humedades en el interior de la vivienda, lo convierten en una elección perfecta a la hora de llevar a cabo un proyecto de estas características.
Encontramos dos excelentes ejemplos de edificios pasivos en nuestra publicación “Arquitectura con XPS”, disponible para descarga de forma gratuita en la web de AIPEX.
El primero de ellos es la Casa Taller Laboratorio Passivhaus Premium (CLTPP), en Robledo del Buey (Toledo). Un proyecto que, según su promotor, Luis A. Martínez, socio-director de Passivhaus Consultores, “es una idea original y única en España. Es una Casa-Taller-Laboratorio Passivhaus Premium positivo. Es decir, está preparado para producir energía para su autoconsumo, para la movilidad eléctrica y para la ciudad”.
El aislamiento de su envolvente, ha permitido conseguir unos valores de demanda de frío y calor excepcionalmente bajos, de 8 Kwh/m2 año; no se puede olvidar que, en lugares con temperaturas extremas tanto en verano como en el invierno, dicho aislamiento permite mantener sin gran gasto una temperatura de confort en el interior. El clima, por tanto, es un importante factor a la hora de optimizar el espesor del aislamiento térmico necesario para cada proyecto.
El XPS de DANOSA ha sido empleado en la losa de cimentación. Su absorción de agua prácticamente nula y su estructura de célula cerrada permiten tanto la transpirabilidad como una máxima resistencia a la compresión, que previene su deformación a largo plazo.
Por otro lado, a finales de 2018 abrió sus puertas la primera oficina construida con criterios Passivhaus de Portugal, ubicada en Ílhavo (Aveiro): el espacio nZEBoffice+ es a un tiempo sede de la Asociación Passivhaus del país y de la empresa Homegrid, responsable de su rehabilitación.
Los resultados de la reforma integral acometida por Homegrid hablan por sí mismos: ahorros de energía de más del 75% y un mayor confort térmico en el interior de la oficina. El poliestireno extruido de FibranXPS, empleado en el aislamiento de los muros por el interior, fue una de las claves. En palabras de João Gavião, arquitecto: “Nos resultaba especialmente atractivo el conjunto de ventajas que nos ofrecía, y, en especial, sus excelentes valores de aislamiento, la facilidad de su instalación y la disponibilidad del material, el hecho de contar con un colaborador en nuestra red, Iberfibran, que es un referente en la producción de XPS, y la posibilidad de, en combinación con otros productos, alcanzar una solución global con un excelente desempeño a la hora de minimizar los puentes térmicos y garantizar la estanqueidad del aire”.
Como muestran estos dos proyectos pioneros, el XPS y el estándar Passivhaus tienen mucho en común. Todo hace pensar que su alianza está llena de futuro y nos traerá muchos nuevos ejemplos de edificios en los que el diseño, el confort y la eficiencia irán de la mano hacia una construcción más duradera y respetuosa con el medio ambiente