El pasado 22 de junio, Aipex se sumó a una importante iniciativa para la transformación del sector de la construcción hacia una mayor sostenibilidad, firmando la Hoja de Ruta para la descarbonización de la edificación en todo su ciclo de vida enmarcada dentro del proyecto Building Life de Green Building Council España. Esta firma tuvo lugar durante la celebración de la jornada Descarbonización XL en Barcelona.

El objetivo de Building Life, en el que participan diez Green Building Councils europeos, es ocuparse del impacto total de los edificios a lo largo de todo su ciclo de vida. Esto implica no centrarse únicamente, como se viene haciendo, en las emisiones resultantes de la fase de uso de los edificios (principalmente procedentes de las necesidades energéticas y de climatización), sino también en las fases de fabricación, transporte, construcción y final de su vida útil. La optimización de cada una de estas fases, buscando la máxima sostenibilidad en cada una de ellas, permitirá reducir el total de emisiones y favorecer el cumplimiento del Pacto Verde Europeo para lograr una Europa climáticamente neutra de cara a 2050.

En efecto, y según datos del reciente informe de la ONU 2020 Global Status Report for Buildings and Construction, el sector de la construcción es el responsable del 38% de las emisiones globales de CO2 relacionadas con la energía, si se tienen en consideración tanto las emisiones de la industria de la construcción como las emisiones relativas a la operación de los edificios.

En Aipex, nos enorgullecemos de nuestro compromiso con una construcción más sostenible y con menores emisiones, que ha llevado a la asociación a una larga colaboración con Green Building Council España, y la firma de esta Hoja de Ruta no podía ser una excepción.

En palabras de Mario Serrano, secretario general de Aipex: «Desde Aipex apoyamos las medidas que ayudan a reducir el consumo energético del parque edificado. No solo en lo tocante a la construcción de edificios nuevos muy eficientes, sino también rehabilitando el parque que ya existe, que es muy extenso y, también, muy ineficiente».

En España, en torno al 50% de los edificios de uso residencial son anteriores a 1980, momento en el que no existía ningún tipo de legislación sobre la exigencia mínima de aislamiento. Por otro lado, si se analiza la calidad de los edificios existentes a partir de las calificaciones energéticas, se observa que más del 81% han obtenido letras E, F o G, las más bajas, en términos de emisiones. Este porcentaje incluso aumenta hasta el 84,5% de los edificios si nos fijamos en su consumo energético, lo que no deja ninguna duda acerca del potencial de la rehabilitación energética en nuestro país ni de la urgencia con que debemos poner (¡nunca mejor dicho!) manos a la obra.

Actualmente, se rehabilitan de media en España 30.000 inmuebles al año, una cifra claramente insuficiente, que debería crecer hasta los 300.000 para alcanzar el objetivo marcado. Esto supondría multiplicar por 10 el ritmo actual de rehabilitación.

«Descarbonizar el uso de los edificios no va a suponer la descarbonización del sector. Llegaríamos como mucho a la mitad», explicaba Dolores Huerta, directora general de GBCE, en la jornada Descarbonización XL. «Desde GBCe asumimos el rol de movilizar a todo el sector, de traer propuestas y herramientas que ayuden a la descarbonización y a hacer un análisis del sector».

«Una acción como #BUILDINGLIFE, que engloba al mercado, administraciones públicas y a la ciudadanía, es una oportunidad perfecta para avanzar hacia una descarbonización real y efectiva, teniendo en el foco el ciclo de vida de los edificios», es la conclusión de Mario Serrano, secretario general de Aipex.